UNFPA brinda apoyo para la salud sexual y reproductiva de las venezolanas migrantes y refugiadas en Brasil

En el nuevo informe del Fondo de las Naciones Unidas para las Poblaciones (UNFPA) ha publicado un nuevo informe «Curando a pesar de los golpes de las crisis», donde se habla sobre los programas de ayuda humanitaria en 10 países.

Según UNFPA hoy en día hay múltiples crisis al rededor del mundo, siendo cada vez más comunes, complejas y prolongadas, que tienen efectos desproporcionados las mujeres y niñas, como las millones de personas en Siria y Yemén huyen de un «conflicto despiadado», los Rohingya buscan refugio en Bangladesh, niñas que son secuestradas en Nigeria, venezolanos que se ven obligados a huir a Brasil por el colapso económico.

Las crisis humanitaria según la agencia de Naciones Unidas producen sufrimiento psicológico y traumas, los cuales amenazan la salud y bienestar de las personas afectadas, así como erosionan los esfuerzos globales para la construcción de la paz.

UNFPA señala que en 2019 casi 143 millones de personas necesitan de ayuda humanitaria y protección. Además, estima que más de 35 millones son mujeres y niñas en edad reproductiva.

Venezolanos desplazados en busca de refugio en Brasil

Para apoyar a los venezolanos con necesidades en Brasil, UNFPA tiene los siguientes programas:

  1. Asegurar la existencia de un ambiente protector para las personas desplazadas que ofrezca atención médica y apoyo psicológico.
  2. Apoyar la prevención de inestabilidad al incrementar la resilencia y construir la capacidad nacional de respuesta.
  3. Disminuir el estigma que rodea a las personas desplazadas promoviendo la coexistencia y mejor disponibilidad de los servicios básicos.
  4. Fortalecer la protección de mujeres y niñas fomentando la reducción y una mejor calidad de la respuesta a la violencia de género.
  5. Mejorar la calidad de los datos a través mecanismos de recolección de datos.
Estrategias e intervenciones

Éxodo de venezolanos a Brasil. Más de 180.000 refugiados y migrantes venezolanos se encuentran actualmente en Brasil, con un promedio de 500 llegadas diarias en el estado del norte, Roraima. La Plataforma de respuesta interagencial para refugiados y migrantes de Venezuela (R4V), anticipa un flujo de 240.000 venezolanos para finales de 2019.

Necesidades de salud reproductiva insatisfechas se agregan a la carga de los venezolanos que buscan asilo en países vecinos como Brasil, regularmente viajan a pie o por medio de transporte público durante días o semanas. Sin acceso a atención de salud o la capacidad de acceder a servicios básicos para atender problemas de salud, el viaje se vuelve aún más peligroso y agravioso para los migrantes manejar su salud y necesidades sexuales y reproductivas, por lo general más retos les esperan al otro lado, incluyendo violencia de género

A su llegada, las mujeres migrantes tienen un alto riesgo de ser víctimas de violencia de riesgo. Los riesgos para la salud sexual y reproductiva para los migrantes y refugiados son especialmente altos en zonas como Roraima, uno de los estados más pequeños y pobres en Brasil. La violencia de género se extiende por todo el estado, el cual tiene los índices más altos en femicidios y violencia sexual en el país. Según los datos de Human Rights Watch, el índice de los femicidios en 2015 en Roraima fue de 11.4 femicidios por cada 100.000 personas, casi 3 veces el promedio nacional. Al rededor del país, las mujeres venezolanas enfrentan discriminación generalizada tanto por su estatus de migrante y por su género, llevandolas a usar sexo para sobrevivir y un aumento en el riesgo de experimentar explotación sexual. Tales experiencias tienen severos efectos en la salud menta y el bienestar psico social.

Llenando los vacíos en la respuesta del gobierno. En febrero de 2018, el gobierno de Brasil implementado acción humanitaria federalizada en respuesta a la afluencia continua de migrantes y refugiados, incluida la Operação Acolhida, que proporciona registro y documentación al momento de llegar, así como atención de emergencias y asistencia humanitaria, incluidos alimentos y albergue temporal. Sin embargo, la creciente presión sobre los servicios públicos han provocado una reacción violenta de los residentes locales y la respuesta del gobierno necesita ser fortalecida en términos de coordinación, recursos y capacidad técnica. El UNFPA, ACNUR y otros socios están apoyando en la reubicación de 5.000 venezolanos del estado de Roraima a otros 17 estados en todo Brasil.

Centro de salud mental y apoyo psicosocial. El Centro de Convivencia y atención Psicosocial se estableció en cooperación con el Ejército de Salvación en diciembre de 2018, coordinado por el UNFPA en asociación con el ACNUR y financiación de la Unión Europea, ubicado en Boa Vista, la capital de Roraima, brinda salud mental primaria y servicios de apoyo psicosocial (MHPSS para personas desplazadas y sobrevivientes de violencia de género entre mujeres, jóvenes, LGBTI, personas con discapacidades y ancianos. El centro también brinda servicios de planificación familiar y distribuye kits de dignidad. Para apoyar el Centro, el UNFPA realizó capacitación en caso gestión para personal de la ONU, las Fuerzas Armadas brasileñas, y socios, implementando gestión de la asistencia sanitaria y personal de campo. Esta centro también trabaja con el Centro inmigrante de referencia, una iniciativa de la Universidad Federal de Roraima que respalda la documentación y la derivación a servicios públicos.

Traducción no oficial

Informe completo aquí